Es solo el rumor del pasado, yo tengo un hombro guardado para días con ruido…no pasa nada…el marrón viste las lágrimas con la misma inquietud que abriga cuerpos bajo un manta, de un miércoles a las diez frente a la Tele…Solo son caricias…diferentes pero caricias…
El jarrón es igual de frágil que la flor que habita en él, la unión les hace dentro del mismo agua que comparten…
La verdad es lo que estas viendo…lo que estas sintiendo parando un instante en la palabra ahora…hoy…si me apuras el resumen de las doce de la noche…que varia en cada vuelta de sístole al diástole…de la más grande de las razones el corazón…
Yo traigo la piel, ahora se que lo que vive dentro solo quiere hablar, como te hablo ahora…callar como cayo al cruzarnos en la cocina…y tu adivina ingenua respiras la solución, regalándome un abrazo…misterio resuelto…
Es solo el rumor del pasado…que acompaña…esta bien…pero no pesa…solo que a veces resbala por las retinas…solo son caricias…diferentes pero caricias…tan loco como dos pelucas colgadas a un telescopio deseando que te duermes porque ellas no ven un telescopio solo ese columpio sube y baja, donde se ríen mas allá de la madrugada porque casi en cada impulso tocan el techo…tan normal como un perchero disfrazado que juega a ser telescopio apuntando a la ventana para enamorar estrellas…tan especial como dejar dos pelucas encima del telescopio de una habitación sin más…
Es solo el humor del pasado, que depende del color variante de un recuerdo nos hace reír o no…pero es que en cada Otoño hay matices que hacen de los colores la palabra nuevo...
